jueves, 24 de enero de 2013

Poesía for dummies


Carnaval, coros y comparsas.
La gracia de la chirigota.
Libretos, discos.
Número 12 de El Popurrí.
Literas, media cama sin hacer.
Una bota por medio, y su respectivo calcetín.
El Jueves. 
Dos portátiles y una tableta.
De las que no se comen
Dos cámaras, y mil fotos más.
Veronika decide morir.
La sonrisa que me escondes.
Una pila de juegos y un ordenador con mucho polvo encima.
Mi hermano.
Mi aburrimiento.
Y yo.

¿Os ha gustado? Si no es así, leedlo en voz alta. Con sus respectivo ritmo y sus paradas. ¿Poesía pura? Náh. Haz una lista. De lo que sea. Abre tu armario por ejemplo:

Pantalón de pana
Pantalón oscuro
Pantalón claro
Pantalón con pelotillas de lana

¿Ves?. Cualquier lista que hagas, leída en voz alta, se convierte automáticamente, para gozo de tu ego, en "poema".

Así que ¡ale!, a hacer listas y leer en voz alta por casa. Quizás consigáis que os encierren de una vez a todos.
Y si os acordáis de mí, poned vuestros poemas aquí.
Prometo respetar derechos de autor.


sábado, 12 de enero de 2013

Ajenidades propias


Amanece otra noche entre las frías sábanas de la calle. Despídense los últimos destellos de luz de mis pupilas dejando paso al ardiente fulgor de la nocturnidad. No es una noche más sino un día menos. Y con éste pierdo ya la cuenta de las veces que olvido el día que es. Definitivamente ya no recuerdo en qué momento permuté del sentido unidireccional a este bípedo lenguaje de una insomne vida. Si acaso pudiese considerarse como tal.

Una vida más por una menos.

El olor a sangre remanente en cualquier esquina. La fluidez de estas letras casi comparable con el resbalar del aire en su último aliento. Todo mezclado en una perfecta proporción de necesidades que me obligan a transformar los nuncas en siempres mientras tu ignorancia despierta cada día con un envoltorio más resistente en un cuerpo cada vez más corrupto. No es culpa mía. La sed aumenta al paso de cada noche. Y cada vez me es más difícil hallar esa fuente vital que tu... nuestro ego exige.

No te permitas dejar de soñar, porque yo conozco tus pesadillas.

miércoles, 2 de enero de 2013

Y próspero año nuevo

Pasan los meses, y los años,
y vas cayendo en la cuenta de que,
cada vez,
tienes menos que decir,
y más cosas que callar.

Aún no sabes si por prudencia
o cobardía.

Quizá sea una mezcla de ambas,
al fin y al cabo, si el mundo arde,
arde contigo dentro.

Te importe o no.